El ministro del Interior Florencio Randazzo consideró ayer que el récord de asistencia a la elección del domingo marcó que las primarias "llegaron para quedarse" y evaluó que el gran resultado del oficialismo se debió a múltiples causas, pero básicamente a que "mejoramos la vida de los argentinos".
"En el 2007 la participación fue del 76,2 por ciento -repasó el ministro-; en el 2009, del 76,9, y en la elección del domingo se alcanzó el 77,82, lo cual marca a las claras que las primarias llegaron para quedarse".
En el balance político, el ministro enumeró que "la fórmula que encabezó la presidenta obtuvo 10.363.319, ganó en 23 de los 24 distritos en los que se votó y obtuvo una diferencia con el segundo, el frente UDESO, de 7.712.253".
De todos modos, Randazzo remarcó con mucho énfasis que "la presidenta obtuvo 1.712.253 votos más que en la elección general de 2007".
En el balance político, el ministro enumeró que "la fórmula que encabezó la presidenta obtuvo 10.363.319, ganó en 23 de los 24 distritos en los que se votó y obtuvo una diferencia con el segundo, el frente UDESO, de 7.712.253".
De todos modos, Randazzo remarcó con mucho énfasis que "la presidenta obtuvo 1.712.253 votos más que en la elección general de 2007".
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